Escribo esto sabiendo que nadie lo va a leer, que los seguidores que tenía ya no estarán y que prácticamente nadie conoce este blog. Y así pretendo que siga, lo empecé en su día por un motivo, ese motivo desapareció y lo tenía abandonado. Pero hoy necesitaba soltar lastre y que mejor lugar que este...
Y sí tengo rabia acumulada, mucha. Me encuentro mal, harto, agobiado, desmejorado, triste... patético. Desde hace mucho tiempo solo una personita me hace sonreír de verdad, desde dentro. Pero tampoco puedo abusar de su compañía, somos muchos para atenderla y los primeros sus padres.
Sé que si mis amigos leen esto dirán que es injusto, que ellos están ahí... Y tendrán razón, tal vez no sea un buen amigo. Seguro que no soy una demasiado buena persona y no valoro lo que tengo como debería. Pero no es algo que pueda controlar. No me siento bien, no encuentro mi sitio, mi lugar, mi vida...
Pero todo eso va a cambiar, voy a cambiar. Ya estoy harto de mi yo actual, de mi vida actual, tengo que cambiar muchas cosas, sé que no me va a resultar fácil, pero tengo que hacerlo. Me lo debo y se lo debo a los que saben que no estoy bien (que se cuentan con los dedos de una mano) y sobretodo a los que lo desconocen y creen que, aun a veces raro o solitario, vivo como quiero y como me gusta.
Soy una persona con mucho carácter, tal vez demasiado, eso me hace perderme muchas cosas, me hace ser agresivo con mis sentimientos y mis palabras. Y aparentemente demasiado exigente. Sin embargo, a la larga soy un gilipollas que traga con casi todo, durante mucho tiempo y casi con placer, porque valoro en exceso cualquier mínimo gesto que recibo, por muy merecido que, analizado con frialdad, sea. Eso va a cambiar...
También soy un poco descuidado con algunas personas que siempre han estado ahí, que siempre me han tratado bien y que lo único que necesitan de mi es cierto cuidado y/o atención. A veces por no complicar la vida a los demás, por no molestar, por no forzar una quedada que igual no viene bien,... por mil estupideces desaparezco durante mucho tiempo, hasta que soy buscado. Es lamentable, lo sé. Eso va a cambiar...
Debido a una serie de malas relaciones sentimentales me he convertido en el típico tío que no se fía de nadie. Que se emparanoia con gestos ridículos, que exige una atención excesiva, que reclama un compromiso radical desde el principio. Lo que provoca muchos malos momentos y dolores innecesarios e injustificables. He conseguido no mantener una relación estable con nadie por miedo a que me vuelvan a hacer daño, a usar y desechar como un pañuelo. Así me he sentido y así me juré que no volvería a sentirme. Pero en lugar de trabajar en mejorar mis exigencias y mi control sobre lo que quiero y aguanto, opté por aislarme, meterme en una burbuja en la que nadie pudiera entrar a perturbar mi paz. Sin darme cuenta de que lo que hacía era mantener mi guerra oculta, haciéndome daño y, lo que es peor, haciéndosela a los demás. Es va a cambiar...
Escribiendo esto, del tirón como hago siempre, me doy cuenta de que el problema que tengo es que me doy rabia, que estoy harto de mi manera de ser conmigo mismo, de ese continuo afán de joderme a mi mismo. Y eso va a cambiar...
Carlos